El servicio a los demás está en el corazón de Cadaniño.
Servimos a estudiantes en situación de riesgo a través de nuestros programas extracurriculares. Servimos a sus familias con asistencia nutricional. Nuestros estudiantes sirven ayudando a preparar el almuerzo y limpiar los centros. Empoderamos a nuestros jóvenes para servir en sus comunidades a través de nuestro club de misiones, donde enseñan clases bíblicas a niños de su vecindario. Todos sirven.
Otra manera en que el servicio se manifiesta en nuestro ministerio es al ser un lugar donde otros pueden venir a servir. Desde nuestros inicios, Cadaniño ha colaborado con Casa de Libertad, una iglesia local en Guatemala.
Desde voluntarios que ayudan con actividades de alcance y escuela bíblica de vacaciones hasta el financiamiento de proyectos ministeriales, han sido generosos en su apoyo, permitiéndonos alcanzar nuestra misión de "Ayudar a las personas a descubrir, abrazar y cultivar sus dones dados por Dios hasta su máximo potencial como una manera de glorificarlo en todos los aspectos de sus vidas."
Este año trabajamos juntos en un evento de alcance llamado "Día por Guatemala" en San José Pinula, donde operamos un Centro de Impacto Comunitario, con la asistencia de 65 voluntarios de la iglesia.
Teníamos varios objetivos en mente:
Fortalecer Familias
Muchas de las familias a las que servimos llevan vidas difíciles y luchan por cumplir con las tareas básicas del día a día para sobrevivir, lo que deja poco tiempo para una interacción positiva con sus hijos.
Uno de los aspectos más poderosos de nuestro programa de fortalecimiento familiar es la creación de espacios intencionales donde padres e hijos pueden compartir actividades divertidas.
Para este evento, nuestros maestros y voluntarios de la iglesia se esforzaron en crear un ambiente donde las familias pudieran venir y disfrutar juntas. Al proporcionarles la oportunidad de jugar, reír y hacer manualidades, generamos momentos de alegría y recuerdos felices que fortalecen los lazos emocionales.
Las respuestas de las familias agradeciéndonos por permitirles disfrutar con sus hijos fueron conmovedoras y significativas.
Amanda fue una de muchas personas que se acercaron con lágrimas en los ojos para preguntar a quién debía agradecer por esta actividad. Dijo que estaba profundamente agradecida porque, si no fuera por este evento, ella y su esposo, quien tiene una discapacidad, no habrían tenido la oportunidad de pasar tiempo juntos en familia.
Claudia, una de nuestras maestras, comentó:
"Me impactó la participación de cuatro ancianas. Estaban tan emocionadas de jugar que parecían niñas saltando de alegría. Dijeron que este día les hizo olvidar sus problemas y les ayudó a sonreír y sentirse jóvenes otra vez. También hubo dos niños con necesidades especiales que, a pesar de sus dificultades, pudieron jugar con la ayuda de sus padres. Los padres expresaron su gratitud porque sus hijos pudieron participar en los juegos como cualquier otro niño. Ser parte de esta actividad tuvo un gran impacto, no solo en las familias, sino también en mí."
Ministrar Espiritualmente
Los voluntarios trabajaron con las familias enseñándoles a hacer pulseras evangelísticas con cuentas de colores que representan los puntos clave del mensaje del Evangelio. Les enseñaron cómo usarlas para compartir las buenas nuevas de salvación en Cristo.
Los padres compartieron sobre las dificultades que enfrentan en sus vidas y recibieron oración y palabras de ánimo. Un pastor local compartió un mensaje de esperanza, recordándoles que Dios promete en Su Palabra estar siempre con ellos y que pueden clamar a Él en busca de ayuda cuando lo necesiten.
Atender Necesidades Educativas
La iglesia recolectó donaciones para comprar útiles escolares para 250 estudiantes. Aunque la educación pública es gratuita en Guatemala, la compra de marcadores, bolígrafos, cuadernos y todo lo necesario para el aprendizaje es un obstáculo para muchas familias. Es común que los estudiantes lleguen el primer día de clases sin siquiera un lápiz o papel.
Docenas de voluntarios de la iglesia pasaron la mañana empacando bolsas con útiles para cada estudiante de nuestro programa extracurricular, asegurando que tengan las herramientas necesarias para avanzar en su educación.
Muchos padres expresaron su profunda gratitud por esta ayuda.
Remodelación del Centro Comunitario
Pintura del centro. Con 100 estudiantes inscritos en cada centro, el desgaste es constante, y necesitamos pintar con frecuencia. Contar con voluntarios para pintar el centro completo permite que nuestros maestros puedan enfocarse en su labor principal: servir a niños y familias vulnerables.
Remodelación de aulas. Casi todo el equipo que usamos en nuestros centros es donado o hecho con materiales reutilizados. La mayor parte de nuestro presupuesto se destina a contratar maestros, ya que son nuestra prioridad, y contamos con un equipo de mantenimiento pequeño. Tim es nuestro presidente/plomero y todo lo demás en el intermedio.
Fue una bendición tener voluntarios construyendo los escritorios necesarios para acomodar a nuestra creciente cantidad de estudiantes.
Brindar un Espacio para Servir
Muchos voluntarios quedaron encantados con la experiencia y expresaron su gratitud por la oportunidad de servir con nosotros. Varios comentaron que han querido servir, pero encontrar un lugar donde sea fácil involucrarse y ayudar de manera significativa no es sencillo. Estaban profundamente agradecidos por la oportunidad de ser una bendición para otros.
Es hermoso ver cómo el ministerio de Cadaniño está evolucionando para ser más que un programa extracurricular. Se está convirtiendo en una plataforma de servicio integral, donde las personas vienen a servir y a ser servidas. Es un espacio donde los creyentes pueden compartir su fe, impactar a su comunidad y servir unos a otros en amor.
